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Cómo trabajar y estudiar a la vez… y no morir en el intento
Ya sea por necesidad o vocación, combinar estudios y trabajo puede resultar caótico y estresante, pero no imposible. Para tener un equilibrio saludable entre tu trabajo, tus estudios y tu vida personal tienes que trazar un plan de acción que te permita sacar el máximo rendimiento a tus días.
La organización es la clave
Una persona organizada genera confianza, tiene una mayor capacidad de toma de decisiones e identifica con facilidad lo que le hace perder el tiempo. En conclusión, es más eficiente.
La administración del tiempo nos permite tener mayor conciencia sobre nuestra vida y lograr más, más rápido y con menos esfuerzo. Consigue una agenda o una app como Time Pro que te ayude a establecer tus objetivos –no solo los del 31 de diciembre– y tus tiempos. Haz tu lista y designa los días y horarios para cada tarea. No es necesario llenar cada minuto, sé realista administrando tu energía. El esfuerzo que dediques a organizar lo verás recompensado. Pero hay una excepción: si una tarea te lleva más tiempo planificarla que hacerla, no la pospongas, hazla y…
Evita la procrastinación
«No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy». Seguro que habrás oído esa frase cientos de veces. Y tiene su razón de ser. Postergar una actividad que no te apetece hacer en ese momento sustituyéndola por otra más agradable puede producirte bienestar en ese momento, pero a la larga solo incrementará tu sensación de agobio. Esa tarea seguirá contigo hasta que te la quites de encima, así que cuanto antes le pongas su check, antes dejará de ocupar espacio en tu lista y en tu cabeza.
Aprende a decir «no»
Es muy probable que cuando tengas tu agenda ya organizada comiencen a querer colarse tareas extra. Peticiones, favores, cambios, añadidos, interrupciones. Fíltralas, que no te de reparo. Ser generoso no consiste en decir que sí a todo o a todos. Hay muchas formas amables de decir «lo siento, no va a ser posible».
No subestimes el tiempo que empleas en esas tareas pequeñas, es muy valioso para lograr tus objetivos más grandes. No pierdas de vista tus prioridades y compromisos. Comenta tu situación y lo que tratas de conseguir. Ellos lo comprenderán y tú te sentirás más aliviado.
¿Eres autoexigente?
Las personas autoexigentes suelen culparse cuando no consiguen acabar una tarea o no pueden cumplir con lo previsto. Exigirse demasiado es una fuente de insatisfacción y malestar. Evalúa tus objetivos y sé realista. Prémiate por los logros y valora cada hito que superes, pero no te culpes si has cometido errores. El aprendizaje es una carrera de larga distancia y los obstáculos las oportunidades de mejora. Y recuerda, una tarea terminada es mejor que perfecta. No te estanques.
El lugar ideal
La decoración y disposición del entorno influye en nuestro estado de ánimo. No es lo mismo estudiar en un trastero sin luz natural, lleno de trastos a la vista por todas partes y una silla incómoda, que estudiar en un escritorio limpio, ordenado y bien iluminado. Busca un lugar tranquilo y cómodo y hazlo tuyo. Los colores claros y neutros, las plantas y la música relajante te ayudarán. Y ahora…
Concéntrate
Focaliza tu atención en lo que estás ejecutando en cada momento. En el aquí y ahora. Olvida el multitasking o te sentirás desbordado. Desactiva las notificaciones de tu smartphone y deja fuera de tu espacio todo lo que te distraiga. Ya hiciste tu lista para que no se te olvide ninguna tarea, así que apártalas también de tus pensamientos hasta que les toque su turno. No somos máquinas, así que no puedes mantener un alto nivel de concentración durante un largo periodo de tiempo. Utiliza la técnica del Pomodoro, haz pausas y…
Distráete
Es importante equilibrar los niveles de estrés. Y para ello, el tiempo libre es igual de importante que el descanso. Tómate un respiro de vez en cuando, eso te ayudará ser más productivo y eficiente en los momentos de trabajo. Hacer «nada» puede ser útil, pero hacer ejercicio aumentará tus endorfinas y te ayudará más rápido a equilibrarte. El deporte consigue que afrontemos más tranquilos, saludables y felices lo que nos venga, así que busca uno que tenga más juego que competición y diviértete.Trabajar y estudiar a la vez requiere disciplina. Y, como todo, no es algo innato sino que se aprende. Ten claro que todo esfuerzo da tarde o temprano su fruto, así que manos a la obra. Ver cómo vas cumpliendo tus objetivos te resultará muy motivante, aumentará tu autoestima y ganarás confianza en ti mismo.
Un último consejo: Disfruta del camino, no solo de la meta.
Esperamos que estos consejos te ayuden a conseguir tus objetivos. Llámanos para pedir cita y venir a nuestras oficinas donde te atenderemos personalmente y te asesoraremos sobre las oportunidades laborales y cuales son los trabajos que más se adaptan a tu perfil. Regístrate en nuestra web para que podamos ponernos en contacto contigo y síguenos en nuestras redes sociales Twitter e Instagram para estar informado de nuevas oportunidades laborales.